Se enfoca en el tipo de cosas que no se valoran cuando están (se da por hecho de que así tienen que ser) y que hacen mucha falta cuando no están.
El muy buen laburo de los actores, sumado al sonido ambiente, la narración y el manejo de la puesta de luces nos transporta a una noche en un pueblo y a una situación cotidiana con la que la mayoría podemos identificarnos y emocionarnos.
Un trabajo muy sutil, enfocado en los detalles. Sabiendo que Verónica Mc Loughlin es la directora y era de esperar que sea así.
Una historia para sentir. Donde lo importante pasa fundamentalmente por lo sensorial. ¿Alguien sabe explicar y transmitir lo que siente? Imperdible."
Fernando de Blas
No hay comentarios:
Publicar un comentario